Visita al Museo Egipcio de Turín

Uno de los grandes alicientes de nuestro viaje por Italia en 2017, y más concretamente a la ciudad de Turín, fue el visitar el Museo Egipcio de esta ciudad.

Es uno de los museos más antiguos, y el segundo en importancia del mundo por su colección de antigüedades egipcias después del Museo Egipcio de El Cairo.

Situado en el Palazzo dell’Accademia delle Scienze, un edificio de estilo barroco, proyectado por el arquitecto italiano Guarino Guarini, en 1678.

Dentro podemos ver un verdadero templo egipcio, el de Ellesiya, que al igual que el templo egipcio de Debod en Madrid, fue donado por el gobierno egipcio a Italia.

Más información en su página en Wikipedia.

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Pulsa aquí para ver el reportaje fotográfico completo.
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Todos mis teléfonos móviles hasta hoy

En los años 2005 y 2013 escribí dos entrada en este blog, hablando de los teléfonos móviles que había tenido hasta la fecha. Esta entrada es la actualización a noviembre de 2017.

Todos mis teléfonos móviles hasta hoy

A lo largo de mi vida he tenido 9 teléfonos móviles. No son muchos, teniendo en cuenta que los suelo apurar bastante, y sacarles bastante partido. Desde 1999 que me compré el primero, salen a uno cada dos años.

(1999) Mi primer móvil fue un Panasonic G520. Guardo muy gratos recuerdos de él, no así de la operadora Telefónica Movistar. Era un móvil sencillo de manejar y que pocas veces fallaba. Incluso tenía vibración. Lo malo es que era muy largo (con antena) y por lo tanto lo llevaba en una funda colgado, ya que era imposible llevarlo en el bolsillo del pantalón.

(2000) El segundo móvil fue un Alcatel One Touch Easy, de la novedosa promoción Dúo de Amena. Mi exnovia y yo compramos un pack de dos teléfonos y así nos salía más barato hablar. El teléfono era bastante malo, fallaba mucho, las teclas con el tiempo dejaban de responder y había que estrujarlas para que funcionaran. La oferta del Dúo fenomenal, muy barata. Cuando me cansé de él, mi madre lo usó una temporada y luego no sé donde acabó.

(2001) Ante la baja calidad del anterior teléfono, mi exnovia me regaló para mi cumpleaños el siguiente, un Nokia 3210. Muy cómodo de manejar y fiable. Como novedad es que al ser más pequeño que los anteriores, podía llevarlo en el bolsillo. Como punto negativo, no tenía vibración.

(2003) El siguiente teléfono fue un Siemens MT50 (modelo que sólo comercializó Amena). Pequeñito, muy cómodo. Lo dejé porque en el mercado estaban apareciendo los nuevos smartphones, con un sistema operativo capaz de instalar aplicaciones.

(2006) Mi primer smartphone, el Nokia 6630. Con el sistema operativo Symbian, se le podían instalar aplicaciones, navegar por Internet, cámara de fotos, etc. Como yo lo quería usar con tarjeta prepago, lo tuve que comprar libre, por lo que me salió caro, aunque luego lo amorticé al no estar sujeto a ningún contrato.

(2009) Seducido por mi primer cacharrito de Apple (un iPod Touch), me decidí sin ninguna duda a comprar un iPhone 3GS, y la verdad es que la experiencia fue de lo más satisfactoria. Tanto, que hoy en día estoy plenamente convencido a seguir comprando móviles de esta marca, por su calidad, diseño, y el hardware y software que integran. Hoy en día este móvil lo usa un hermano.

(2012) Al cabo de 3 años, y con nuevos modelos de móviles de Apple, me decidí a comprar el iPhone 5, con muchísimas más prestaciones que mi anterior móvil, con una cámara de fotos bastante buena, y un diseño espectacular.

(2014) Pasados 2 años desde el anterior iPhone, Apple me conquistó con un móvil, el iPhone 6, donde cambiaba el diseño, y ofrecía un mayor tamaño de pantalla, 4,7″. Más prestaciones y cámara fotográfica en un cuerpo de aluminio que fue superventas.

(2017) A los 3 años de la compra del anterior móvil, me apetecía enormemente cambiar de diseño de móvil y mejorar mi ya maltrecha batería, y Apple lo volvió a hacer, presentando su iPhone X. El móvil más bonito y potente hasta la fecha, con una cámara de fotos sobresaliente, que es el que actualmente disfruto, y espero que así sea por al menos 3 años.

¿Y vosotros, cuántos habéis tenido?

“EL JUEGO DE GERALD“ de Stephen King

ÚLTIMO LIBRO LEÍDO: “EL JUEGO DE GERALD“ de Stephen King.

A raíz del estreno en la cadena Netflix, de la adaptación cinematográfica de esta novela del rey del terror, me decidí a leerla antes de su visionado.

“EL JUEGO DE GERALD“ de Stephen King

“El Juego de Gerald” es una novela escrita en 1992, bastante irregular y con demasiadas páginas para contar una historia oscura y perturbadora, una lucha por la supervivencia física y sobre todo mental muy desgarradora. Con una desarrollo en su mayor parte aburrido, llena de altibajos, logra al final generar un poco de interés, pero sin lograr llegar al aprobado.

La adaptación cinematográfica es digna, ya que desecha buena parte de las carencias de la novela, aunque la historia que cuenta sigue teniendo muchas lagunas.

Una de las pocas novelas que he leído de Stephen King, que no recomiendo.

Argumento

En una cabaña aislada, desnuda y esposada a la cabecera de la cama, Jessie asiste inerte al macabro desenlace del juego erótico de Gerald, el hombre con quien ha convivido durante veinte años y que ahora está tendido en el suelo junto al lecho, muerto.
Sola, sin poder liberarse, acuciada por el hambre y la sed y asediada por los fantasmas del pasado, Jessie se enfrenta al desafío de sobrevivir a la situación, mientras va adquiriendo conciencia de que la realidad es aún más pavorosa que la peor de sus pesadillas.

Fragmentos

“El hombre titubeó un segundo, ligeramente fruncido el entrecejo, y luego cruzó el dormitorio y se llegó al tocador situado a la izquierda de la puerta del cuarto de baño. Se le iluminó un poco el semblante. Jessie le observó desde la cama, donde estaba echada, con los brazos levantados y extendidos, lo que la confería cierta apariencia de Fay Wray encadenada y a la espera del gran simio de King Kong. Tenía las muñecas sujetas a las columnas de caoba de la cama mediante sendas esposas. La cadena de los grilletes permitirían a cada una de las manos un movimiento de unos quince centímetros. No gran cosa.”

“Cualquier mañana, uno se despertaba en la cama sin saber que acaso fuera la última vez que lo hiciese.”

“Es extraño las cosas que una recuerda cuando cree que le ha llegado la hora de morir, ¿verdad?”