Comas

si estás leyendo esto, sí tú, no mires a izquierda ni a derecha, porque este mensaje es para ti, debes saber, aparte de que no usamos puntos, que este texto ha sido convenientemente insertado en una determinado blog de Internet, da igual en cual, porque lo que importa es que en este momento lo estarás leyendo, y por ende esta entrada, y consecuentemente debes saber que has estado en coma durante 2 años, y todavía lo estás, aunque no seas consciente de ello y nosotros ahora estamos tratando una nueva técnica para traerte de vuelta a la realidad, sin pasar por la casilla de meta, no sabemos donde va a terminar este mensaje en tu sueño, pero esperamos que funcione, por favor despierta, hay gente que te odia, pero otra, sin contar a tu madre y tu abuela nonata fallecida hace más de 15 años, te quieren, despierta de tu vida, toma conciencia y consciencia de ti, buscamos tu discernimiento, extrañamos mucho lo que puedes llegar a ser, end of line

Escribir

Hay noches en las que empiezo a escribir sin rumbo fijo. Una palabra sigue a otra, y esta a otra, encadenando frases no previstas. Puedes llamarle escritura automática, desvarío… Yo prefiero llamarlo huida, o liberación.

Sacar lo que me golpea una y otra vez, en forma de poema, reflexión o sin sentido que quizá borre inmediatamente. Exorcizar mis sentimientos, mis miedos prestados a personajes no tan ficticios. Desnudar lo más profundo de mi ser, lo más sagrado, lo que soy y siempre seré. Vestir emociones que me embargan o que anhelo poseer. A veces solo dura unos minutos, otras veces, unas pocas horas. Me emborracho de ideas que se entremezclan, luchando por descifrar el sentido para el que vieron la luz.

El final nunca es el final, solo un punto y seguido, un grito de basta ya, un remedio momentáneo pero nunca la cura. En esas noches, acallo un poco los fantasmas que me visitan en sueños. Es mi forma de protegerme de ellos. De liberarme de sus cadenas y sentirme volar. De olvidar que alguna vez existieron y me atenazaron en sus sombras.

Por la mañana ya nada tendrá sentido, el objetivo solo será un vago recuerdo… y quizá, al leer estas palabras sin rumbo fijo, sienta que debo borrarlas para siempre…

Adelante

Después de todo lo que ves, todo ese dolor, todas las cosas que no entiendes ni entenderás, toda esa ignorancia, toda esa injusticia, todo ese mundo podrido a merced de lobos, todas esas eternas nubes de tormenta que preceden al huracán, todas esas vidas pisoteadas…

Tienes que mantener el sentido del humor, tienes que ser capaz de reírte por dentro, de seguir ilusionado, mantener intacta tu alma revestida por una coraza indestructible, de no perder tu fe en ti, ni perder tu camino….

Este es el verdadero reto, esta es la verdadera felicidad. Nadie dijo que fuera fácil.
Adelante…

Mientras

Sólo dejaré de expresarme cuando llegue el fin,
cuando mi cuerpo sólo sea un contenedor y mi alma me haya abandonado.

Ni la más cruel de las derrotas podrá con mis palabras.
Ni el dolor reinando en la desesperación nublará mis ideas.

La última esperanza sólo sucumbirá cubierta de tierra,
mientras en el aire aún perdure el eco encadenado de mil te quieros.

Ni la pérdida más desgarradora logrará condenarme al silencio.
Ni tu ausencia infinita impedirá que en cada uno de mis parpadeos te vea.

Aunque jamás tu mirada se vuelva a cruzar con la mía, te miraré al mirar a cualquier parte.
Aunque no tengamos ya nada que decirnos, nunca dirán que mi voz dormía.

Esdrújulas

Ejército de sílabas histéricas.
Mirándote. Pensándote.
Éxtasis de erráticas imágenes.
Romántico espectáculo sin cómplices.
Amándote.

Vértigo ante la penúltima fábula.
Catástrofe de lágrimas utópicas.
Desplazándote. Negándote.
Póstumo relámpago de lo monótono.
Olvidándote.

Uno de mis relatos en la radio

El día 24 de febrero, el programa de radio La Rosa de los Vientos, de Onda Cero, uno de los de más audiciencia de la radio española, emitió una dramatización de mi relato «Triste Alegría«.

Para mí es un gran orgullo, ya que hace unos 10 años que sigo este programa semanalmente, desde los tiempos en que lo presentaba el maestro Juan Antonio Cebrián, y ahora con Bruno Cardeñosa.

Os dejo 2 enlaces para escuchar el relato:

1) Desde la web de Onda Cero (dándole al icono de Play, que aparece debajo de la foto):
http://www.ondacero.es/audios-online/la-rosa-de-los-vientos/microrrelatos/microrrelato-triste-alegria_2014022300029.html

2) Para descargarlo o escucharlo en vuestros dispositivos desde mi cuenta de Dropbox:
http://goo.gl/2NRMuC

A ver qué os parece.

Os recuerdo que os podéis informar sobre como comprar o descargar mi libro gratis, con este y más relatos y poemas en la siguiente dirección:

https://josemarg.com/wp/?page_id=1602