Más de 2,5 millones de personas de 180 países ya compraron parcelas de tierra en la Luna y en Marte por el valor de 1.000.000 de dólares. Y no es broma: la gente se ha tomado tan en serio el asunto de las exploraciones espaciales que, según un informe del sitio web especializado “space.com”, son cada vez más los que quieren mudarse -créase o no- a la Luna. Como los tratados internacionales sobre el espacio dejan agujeros legales sin pérdida de tiempo, aparecieron auténticos estafadores conocidos como “los abogados espaciales”, que hacen negocios a través de Internet y venden terrenos en la Luna y en Marte. El asunto parece ridículo, pero es un negocio en auge. Y aunque se trata de un fraude, mientras los expertos en leyes discuten, el negocio sigue floreciendo.
Los clientes suelen ser personas a quienes se las convence de que por 19,00 dólares (gastos de envío aparte) obtienen una parcela, con derecho a edificación en otro mundo.
La empresa Lunar Embassy es la principal comercializadora de este insólito rubro, aunque ya tiene competencia. Según su fundador, Denis Hope, ellos son dueños de todos los planetas del Sistema Solar, excepto de la Tierra; aunque a juicio de los expertos en materia jurídica esto es absurdo, pues un tratado internacional de 1967 prohíbe la propiedad privada más allá de la Tierra.
Pese a esto, la gente de la empresa asegura que a finales de 2004, “El gobierno galáctico”, denominación de su “territorio”, plantará bandera en la Luna. Sin embargo, Hope eludió contestar sobre qué nave viajará antes de fin de año a la Luna, pues la próxima misión lunar está planteada por la NASA y la ESA recién para dentro de 10 años.
Pleitos cósmicos
Como en la Tierra, las empresas que se dicen dueñas de Marte y de la Luna dan al comprador un título de propiedad y un mapa. Según Lunar Embassy, se venden unos 1.500 terrenos diarios en los territorios espaciales. Hope afirma que se trata de algo legal. Y asegura que gastó 70.000 dolares en abogados para defender su compañía e intimidar a la competencia, a la que califica de “copiona” (algunas de estas empresas debieron cerrar, no por el negocio en sí mismo, sino por problemas con los derechos de autor).
Los expertos en cuestiones legales afirman que las ventas no tienen ninguna base jurídica. Sin embargo, vaticinan pleitos cósmicos, especialmente ahora que George W. Bush dice que los seres humanos están abocados a conquistar el cosmos. Lo cierto es que el Instituto Internacional de Leyes Espaciales está trabajando en un documento para declarar nulo cualquier reclamo sobre la propiedad de un cuerpo celeste.
De La Gaceta.
No es de extrañar que la Nasa oculte fotografías como esta tomada con su robot Spirit.