Reproduzco en esta entrada un texto que leí hace unos días en Knabberspass! y que considero que será bastante interesante para muchos. En mi, hizo saltar una chispa…
Un profesor, al empezar su clase de Filosofía, cogió silenciosamente un enorme tarro de mayonesa vacío y empezó a llenarlo con pelotas de golf.
Entonces preguntó a los estudiantes si el tarro estaba lleno, y todos contestaron que sí. A continuación, el profesor sacó una caja de piedrecitas y las echó en el recipiente. Agitó el envase lentamente y las pequeñas piedras rodaron entre los espacios que habían dejado las pelotas de golf.
De nuevo, el profesor preguntó a los estudiantes si estaba repleto. Ellos dijeron que sí. Después, el profesor tomó una caja de arena y la vació en el bote. Lógicamente, la arena rellenó el resto del espacio. Entonces preguntó, una vez más, si el tarro estaba lleno.
Los estudiantes contestaron con un “sí” unánime. A continuación, el profesor sacó dos tazas de café de debajo de la mesa y las volcó en el recipiente, rellenando totalmente el espacio entre la arena.
Los estudiantes, asombrados, empezaron a reírse.
“Ahora -dijo el profesor mientras las risas amainaban-, quiero que penséis que este tarro representa vuestra vida. Las pelotas de golf son las cosas importantes: vuestra familia, los hijos, la salud, los amigos y hobbies favoritos. Cosas que, si todo lo demás desapareciera, permanecerían y llenarían aún vuestra existencia.
Las piedrecitas son las otras cosas que importan, como vuestra casa, el trabajo o el coche. La arena es todo lo demás, es decir, los pequeños asuntos”.
Y añadió: “Si ponéis primero la arena en el tarro, no quedará espacio para las piedrecitas o para las pelotas de golf. Lo mismo ocurre en la vida. Si malgastáis las energías con tonterías, nunca tendréis tiempo que dedicar a las cosas importantes. Prestad atención a lo que es fundamental para vuestra felicidad. Jugad con los niños, sacad tiempo para realizar chequeos médicos, llevad a vuestra pareja a cenar, jugad otros 18 hoyos… Siempre habrá ocasión para limpiar la casa y ordenar.
En primer lugar, cuidad las pelotas de golf, las cosas que realmente importan. Estableced vuestras prioridades. El resto es sólo arena”.
Entonces, una de las estudiantes levantó la mano y le preguntó qué representaba el café. El profesor sonrió. “Me alegro de que me lo hayas preguntado. Sólo quería demostrar que, por muy completa que parezca tu vida, siempre hay tiempo para tomar una taza de café con un buen amigo”.
Morajela: Menudo tarro de mayonesa debía ser. Con lo que a mi me gusta, tengo que averiguar donde comprarlo 🙂